9 señales clave de esclerosis múltiple que tu cuerpo podría estar enviando

La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad crónica de evolución impredecible que afecta al sistema nervioso central y altera la comunicación entre el cerebro y el resto del organismo.

Sus manifestaciones clínicas pueden ser muy diversas, tanto en tipo como en intensidad, lo que en muchos casos retrasa su detección. Aun así, identificar las señales tempranas que envía el cuerpo es fundamental para acudir oportunamente al médico y favorecer un mejor control de la enfermedad. Estos son nueve signos importantes a los que conviene prestar atención:

1. Fatiga intensa Uno de los síntomas más frecuentes y limitantes es un cansancio extremo y persistente que no mejora con el descanso. Se trata de un agotamiento profundo que puede dificultar de manera importante las actividades cotidianas.

2. Alteraciones visuales La visión borrosa, la visión doble, la pérdida parcial o total de la visión en un ojo (neuritis óptica) y el dolor al mover los ojos son manifestaciones comunes y, en muchos casos, de las primeras en aparecer.

3. Entumecimiento u hormigueo Las sensaciones anormales como hormigueo, adormecimiento o “pinchazos” en la cara, brazos, piernas o tronco son muy habituales. Su intensidad y duración pueden variar considerablemente.

4. Debilidad muscular La aparición de debilidad sin causa aparente en una o más extremidades puede afectar la marcha, la fuerza para levantar objetos o la realización de tareas diarias. Puede presentarse de forma intermitente o progresiva.

5. Problemas de equilibrio y coordinación La inestabilidad al caminar, la torpeza, los mareos, el vértigo o la dificultad para coordinar movimientos finos pueden indicar compromiso de áreas cerebrales encargadas del equilibrio y la coordinación.

6. Espasticidad La rigidez muscular o los espasmos involuntarios, especialmente en las piernas, pueden resultar dolorosos y limitar el movimiento. Con el tiempo, estos síntomas pueden afectar de forma significativa la movilidad.

7. Dificultades cognitivas Problemas de memoria, concentración, rapidez mental o para realizar varias tareas al mismo tiempo pueden presentarse en la EM. A menudo son sutiles al inicio, pero impactan la vida diaria.

8. Alteraciones de la vejiga y el intestino La urgencia o frecuencia urinaria, la incontinencia, la dificultad para vaciar la vejiga y el estreñimiento son síntomas frecuentes, relacionados con el daño en los nervios que regulan estas funciones.

9. Dolor crónico Muchas personas con esclerosis múltiple experimentan dolor persistente, que puede ser de tipo neuropático (ardor, descargas eléctricas, punzadas) o musculoesquelético, asociado a la espasticidad o a alteraciones posturales.

Reconocer estos signos y buscar atención médica temprana puede marcar una diferencia importante en el diagnóstico y manejo de la esclerosis múltiple, permitiendo un mejor control de los síntomas y una mayor calidad de vida.

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