Una reunión en Madrid el martes 29 de abril retrasó el avance del acuerdo para la posible llegada de Carlo Ancelotti a la Selección Brasileña. Después de haber aceptado la propuesta de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) para dirigir a la Canarinha, Ancelotti y su equipo comenzaron a negociar con el Real Madrid la rescisión anticipada de su contrato, que originalmente dura hasta finales de 2026.
Durante las negociaciones, el técnico italiano expresó su deseo de recibir una parte significativa de lo que le correspondería del contrato si se finalizara de manera anticipada. La directiva del Real Madrid está dispuesta a aceptar su salida después de la temporada 2024/25 de LaLiga, pero sin abonar nada por el resto del contrato, lo que ha generado un impasse en las conversaciones y ha alejado a Ancelotti de Brasil.
Los representantes de la CBF en Madrid ya están al tanto de este conflicto y siguen el caso a la distancia. La intención es esperar algunos días para que se resuelva el tema sin presionar a las partes involucradas, evitando así que el acuerdo se rompa.
De acuerdo con ESPN, se espera que Ancelotti llegue a Río de Janeiro, sede de la CBF, el 26 de mayo, dos días después de lo que sería su despedida del Real Madrid, tras el final de LaLiga. Brasil tiene previsto debutar con Ancelotti en el banquillo el 5 de junio contra Ecuador en Quito. La CBF debe enviar una lista preliminar de jugadores a la FIFA antes del 18 de mayo y confirmar los nombres antes del 26 de mayo.
Aunque las negociaciones entre la CBF y Ancelotti se han intensificado en las últimas semanas, la confederación niega oficialmente cualquier acuerdo con el entrenador, y asegura que solo el presidente Ednaldo Rodrigues y el director de selecciones nacionales, Rodrigo Caetano, son los encargados de tomar la decisión sobre el nuevo técnico.
Brasil se encuentra en el cuarto lugar en las Eliminatorias Sudamericanas, con 21 puntos, los mismos que Uruguay y Paraguay, mientras que Argentina lidera con 31 puntos y Ecuador está en segundo lugar con 23. La selección brasileña no tiene entrenador desde la destitución de Dorival Júnior a finales de marzo, tras la derrota por 4-1 ante Argentina en Buenos Aires.