El gobierno municipal de Múzquiz, encabezado por la alcaldesa Laura Jiménez, dio respuesta inmediata a una petición vecinal en la comunidad Villa de las Esperanzas, donde un tajo de carbón abandonado generaba focos de infección y daños en viviendas cercanas.Con el apoyo de maquinaria pesada y material de relleno, las cuadrillas municipales realizaron trabajos para cerrar el tajo, que durante años permaneció sin intervención tras la extracción de minerales en la zona.
Relleno del tajo mejora seguridad y calidad de vida
Los habitantes de la comunidad agradecieron la intervención, ya que el hueco representaba un riesgo sanitario, especialmente en temporada de lluvias, cuando se acumulaba agua estancada.La alcaldesa reiteró que estas acciones forman parte de un programa de atención a pasivos ambientales generados por actividades mineras en la región carbonífera.La zona de Múzquiz y Sabinas concentra decenas de tajos sin remediación, los cuales pueden ocasionar hundimientos, contaminación de suelo y agua, y problemas respiratorios. Autoridades estatales y federales han emitido recomendaciones sobre la necesidad de realizar estudios y rellenos para proteger a la población.