Autoridades piden respetar al camión escolar en Eagle Pass

Con el regreso a clases ya en marcha en todo el distrito escolar de Eagle Pass, las autoridades del condado de Maverick han iniciado una campaña de concientización dirigida a todos los conductores que transitan por las calles y avenidas cercanas a las escuelas, advirtiendo sobre las fuertes sanciones económicas que conlleva el no respetar las señales de los camiones escolares durante el ascenso o descenso de estudiantes.
Tom Schmerber, sheriff del condado de Maverick, informó que esta es una de las infracciones más graves en materia de seguridad vial en temporada escolar, debido a que pone en riesgo directo la integridad de los estudiantes. Explicó que cada vez que un autobús escolar despliega su señal de “STOP”, todos los vehículos en ambos sentidos deben detenerse por completo, independientemente del carril en el que se encuentren, y no pueden reanudar la marcha hasta que los estudiantes hayan descendido completamente y el camión retire la señal.
El incumplimiento de esta norma acarrea multas considerables, que oscilan entre los 500 y los 1,000 dólares, dependiendo de la gravedad y circunstancias de la infracción. Schmerber recordó que el año anterior se levantaron varias multas por esta causa, sin precisar cifras exactas, lo cual indica que aún existe desconocimiento o desinterés por parte de algunos conductores, lo que representa un riesgo para la seguridad estudiantil.
Además del respeto a los autobuses escolares, el sheriff también enfatizó la importancia de obedecer los límites de velocidad en las zonas escolares, los cuales están fijados en 20 millas por hora (aproximadamente 32 km/h). Estas zonas están claramente señalizadas, y durante el horario escolar, cuentan con mayor presencia policial y dispositivos electrónicos de monitoreo, por lo que ignorar esta regla también puede derivar en una sanción económica.
La alerta llega en un momento clave, dado que más de 14,000 estudiantes del Distrito Escolar de Eagle Pass han retornado a clases, lo que ha incrementado significativamente la actividad vehicular en las mañanas y al final de la jornada escolar. En este contexto, las autoridades buscan evitar cualquier tipo de incidente que pueda surgir a causa del descuido o la imprudencia de los conductores.
Schmerber añadió que la mayoría de los autobuses están equipados con cámaras de videovigilancia que graban tanto el exterior como el interior de la unidad. Estas grabaciones pueden ser utilizadas como evidencia para sancionar a los infractores que ignoren la señal de alto, por lo que no es necesario que un oficial presencie el hecho para que se aplique una multa.
También recordó que los camiones escolares realizan múltiples paradas en diferentes barrios de la ciudad y sus alrededores, por lo que los conductores deben estar siempre atentos al posible despliegue de la señal de “STOP”. En muchas ocasiones, los estudiantes cruzan la calle frente al autobús, lo que aumenta el peligro si los vehículos continúan en movimiento.
Las autoridades del condado han reiterado que esta medida no busca castigar, sino prevenir tragedias. La seguridad de los estudiantes es una prioridad, y para ello se requiere el compromiso de toda la comunidad, especialmente de quienes están al volante. Ignorar un alto de autobús escolar no solo implica una sanción económica, sino también una posible responsabilidad penal en caso de un accidente.
En este mismo sentido, se ha pedido a los padres de familia que también colaboren educando a sus hijos sobre cómo comportarse de manera segura al abordar o descender del autobús. Recomendaciones como mirar a ambos lados antes de cruzar, no correr en la vía pública y esperar las indicaciones del conductor del autobús son esenciales para garantizar un traslado seguro.
El Departamento del Sheriff continuará realizando patrullajes estratégicos en horas pico y zonas escolares para monitorear el cumplimiento de estas disposiciones. Además, se evalúa la posibilidad de reforzar las campañas de concientización mediante redes sociales, medios locales y charlas comunitarias.
En resumen, la advertencia es clara: respetar las señales de los autobuses escolares no es opcional. Es una norma legal y una responsabilidad ciudadana que busca proteger la vida de los estudiantes. El llamado es a conducir con precaución, disminuir la velocidad en zonas escolares y, sobre todo, a detenerse completamente cuando un camión escolar despliegue su señal de alto. Un momento de prisa no puede costar una vida.
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