Por espacio de 15 años, Piedras Negras fue reconocida a nivel nacional como una sede clave de campeonatos infantiles de béisbol, atrayendo delegaciones de distintas partes del país y generando una derrama económica considerable para el sector comercio y turístico de la ciudad. Estos torneos se celebraban tradicionalmente en dos periodos del año: Semana Santa y verano, siendo este último el de mayor participación, con la llegada de hasta 18 equipos provenientes de diferentes estados.
Hoy en día, el llamado de empresarios locales y promotores del turismo deportivo es claro: urge reactivar estos campeonatos que no solo representan un impulso al deporte infantil, sino también una oportunidad para dinamizar la economía regional.
La presencia de cientos de familias durante una semana completa significaba para los hoteles locales una ocupación del 80% o más, lo cual repercutía directamente en la contratación temporal de personal, mejora de servicios y expansión de la oferta turística. Restaurantes, tiendas deportivas, centros recreativos y comercios en general también se beneficiaban del flujo constante de visitantes que dejaban un consumo importante en la localidad.
Además del aspecto económico, estos campeonatos eran espacios de convivencia, formación de valores y promoción del deporte entre niños y jóvenes, fortaleciendo el tejido social y la identidad regional en torno al béisbol.
Actualmente, se percibe una ausencia de organización y promoción oficial para atraer nuevamente estos eventos, lo que ha provocado que otras ciudades del norte del país capitalicen esta oportunidad. Sin embargo, los empresarios locales y clubes deportivos insisten en que Piedras Negras cuenta con la infraestructura, experiencia y logística necesaria para volver a ser sede, si se logra una coordinación efectiva entre autoridades municipales, asociaciones deportivas y sector privado.
La reactivación de los campeonatos infantiles de béisbol sería no solo una apuesta económica, sino también un compromiso con el deporte y la niñez mexicana, dos pilares fundamentales para el desarrollo armónico de cualquier comunidad.
El llamado está hecho. Piedras Negras tiene el potencial. Solo hace falta voluntad, planeación y trabajo en conjunto para volver a convertir a la ciudad en un referente nacional del béisbol infantil.