Con 60% menos afluencia, rutas se hacen eternas en vacaciones

La Dirección de Transporte y Vialidad, el flujo de pasajeros en el transporte urbano ha disminuido afectando especialmente a las rutas más utilizadas por estudiantes y trabajadores.

Durante el actual periodo vacacional de verano, la afluencia de usuarios en el transporte público de Monclova ha disminuido de forma significativa debido a la ausencia de estudiantes y a que muchos trabajadores se encuentran fuera de actividad. Pero, quienes siguen activos enfrentan mayores dificultades en sus traslados diarios por la reducción en la frecuencia del servicio.

Según cifras oficiales de la Dirección de Transporte y Vialidad, el flujo de pasajeros en el transporte urbano ha disminuido hasta en un 60%, afectando especialmente a las rutas más utilizadas por estudiantes y trabajadores. Habitualmente, las unidades de transporte colectivo tenían una frecuencia de paso de 15 a 18 minutos, pero actualmente los tiempos de espera se han extendido a entre 40 y 45 minutos. A pesar de que algunas personas han reportado demoras superiores a 2 horas, el director, Teodoro Flores, aseguró que todas las rutas siguen operando, aunque con menor regularidad debido a la baja demanda. Durante esta semana no se han recibido quejas formales, aunque existe inconformidad generalizada hacia el servicio, tanto de los taxis como del transporte colectivo, que se perciben como menos eficientes en este periodo.

Viajar al trabajo, un reto cotidiano

La reducción de unidades en circulación y el alargamiento en los tiempos de espera han obligado a muchos usuarios a modificar su rutina y, en algunos casos, su economía. María Gertrudis, una trabajadora doméstica que reside en el sector sur de la ciudad, enfrenta diariamente un trayecto complicado hasta el norte, donde labora. Normalmente, toma dos rutas de camión, lo que representa un gasto de 26 pesos diarios de ida y 26 más de vualta. Sin embargo, en varias ocasiones durante estas vacaciones ha tenido que recurrir a taxis o servicios de aplicación para no llegar tarde, lo que ha elevado su gasto de transporte a 100 pesos por cada viaje. 

Un servicio esencial con deficiencias temporales

Aunque las autoridades de Transporte y Vialidad aseguran que las rutas no han sido suspendidas y que todas las unidades continúan trabajando, reconocen que el sistema de transporte está operando con menos eficiencia debido a la baja demanda. Los trabajadores tienen dependencia hacia un servicio que, durante la temporada vacacional, no responde con la misma agilidad. La disminución del 60% en la afluencia es una baja en el flujo de usuarios que también afecta económicamente los transportistas. Al haber menos personas en la vía pública, los concesionarios reducen frecuencias para optimizar recursos. La falta de unidades disponibles en horarios clave obliga a las personas a esperar por largos periodos o, en el peor de los casos, a pagar más por transporte alternativo.

Impacto estacional en la movilidad urbana

El ciudadano Rolando Álvarez, quien también hace uso del transporte público, expuso que el transporte público en Monclova durante las vacaciones requiere de estrategias adaptativas que consideren a los usuarios que siguen activos. 
Necesidad de los usiarios que siguen activos. Personas como María Gertrudis, Rolando y muchas otras en condiciones similares, requieren un servicio constante y confiable para poder cumplir con sus responsabilidades en horarios específicos que para ellos es indispensable respetar. 

Una afectación bilateral durante el verano

Lo que se vive en las calles no es solo una menor circulación de unidades, sino una afectación concreta a la rutina y la economía de quienes siguen sosteniendo actividades laborales esenciales, así como de los mismos chóferes que reducen su operatividad. 

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