COVID-19: Alerta por variante NB.1.8.1 detectada en EU tras casos importados desde China

Una nueva variante del virus SARS-CoV-2, denominada NB.1.8.1, ha despertado la preocupación de autoridades sanitarias internacionales debido a su rápida capacidad de transmisión y el posible impacto que podría tener en la salud pública.

Esta subvariante, vinculada al linaje Ómicron, fue detectada inicialmente en viajeros procedentes de China y ya se ha identificado en diversas regiones de Estados Unidos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) la ha incluido en su lista de variantes bajo vigilancia.

Preocupación internacional por su expansión silenciosa

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. han emitido recomendaciones para reforzar la vigilancia en aeropuertos y zonas densamente pobladas, ante la inquietud por la falta de claridad en torno a los primeros casos detectados.

La aparición de NB.1.8.1 ocurre en un momento en que muchos países han reducido sus sistemas de monitoreo epidemiológico, lo cual podría facilitar su diseminación sin ser detectada.

Mutaciones preocupantes en la proteína Spike

Esta variante comparte similitudes genéticas con otras cepas como BA.2.86, pero presenta mutaciones adicionales en la proteína Spike, lo que podría mejorar su capacidad para contagiar y evadir la respuesta inmune.

Su hallazgo en pasajeros provenientes de China ha generado dudas sobre un posible subregistro de casos en ese país. Los especialistas advierten que el relajamiento de medidas sanitarias y la baja cobertura de refuerzos vacunales podrían facilitar su avance, sobre todo en adultos jóvenes y grupos vulnerables.

Síntomas reportados con la NB.1.8.1

Los casos observados hasta ahora presentan síntomas similares a los de otras variantes recientes, aunque con duración más prolongada y un posible regreso de molestias digestivas. Entre los síntomas más comunes se encuentran:

• Dolor de garganta persistente

• Tos seca

• Fatiga intensa de larga duración

• Congestión nasal y cefalea

• Disminución del apetito

• Fiebre intermitente

• Problemas gastrointestinales

Algunos pacientes han experimentado fatiga severa por más de dos semanas, un cuadro que recuerda al llamado "COVID persistente", lo cual mantiene en alerta al personal médico.

Llamado a reforzar medidas preventivas

La OMS ha incorporado a NB.1.8.1 en su lista de variantes que requieren seguimiento, especialmente por su presencia creciente en estados como California y Nueva York. Aunque no se ha clasificado como “variante de preocupación”, su evolución es monitoreada de cerca.

Por su parte, los CDC han solicitado reactivar protocolos básicos de control, como el seguimiento en aeropuertos y centros de salud comunitarios. También advierten que la baja tasa de vacunación con refuerzos podría incrementar el riesgo de nuevos brotes.

Recomendaciones ante la propagación de NB.1.8.1

Las autoridades de salud reiteran la importancia de retomar medidas preventivas para frenar posibles contagios. Entre las principales sugerencias están:

• Uso de cubrebocas en espacios cerrados o mal ventilados

• Lavado frecuente de manos y uso de gel antibacterial

• Asegurar una buena ventilación en interiores

• Permanecer en aislamiento si se presentan síntomas

• Aplicarse dosis de refuerzo, especialmente en adultos mayores y personas inmunocomprometidas

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