El Tiempo de Monclova

REFLECTOR ESPECTACULOS Monclova Piedras Negras Carbonífera Saltillo Torreón Seguridad

Denzel Washington ha encontrado por fin su vocación (y no es actuar)

ESPECTACULOS
Redacción El Tiempo
comparte facebook comparte X comparte WhatsApp comparte Telegram

Muchas de las interpretaciones más destacadas de Denzel Washington —desde su imponente papel como Malcolm X hasta el corrupto policía Alonzo Harris en Día de entrenamiento— se caracterizan por un poderoso sentido de autoridad y una ausencia total de complacencia o necesidad de agradar. Sus personajes tienen una reserva interna, inexpugnable y enigmática, que les es propia.

Las cualidades que han convertido a Washington en una leyenda del cine son, según aprendí en persona, las mismas que lo hacen un conversador poco común y bastante complejo. Nuestra primera conversación fue a distancia; él estaba en un estudio fotográfico en Los Ángeles, afectado por los incendios, mientras yo estaba en Nueva Jersey. A pesar de la conexión virtual, la charla se sintió distante, como si nunca lográramos conectar.

La segunda vez fue distinta. Nos encontramos en persona en una austera habitación con corrientes de aire en Manhattan, donde ensayaba para su próxima obra en Broadway: Otelo, que se estrenará el 24 de febrero, coprotagonizada por Jake Gyllenhaal y dirigida por Kenny Leon, ganador de un premio Tony. No sé exactamente por qué, pero la segunda charla fluyó mejor. Para mí, toda la experiencia fue tan inolvidable como una de sus actuaciones.

En la conversación, Washington compartió que a finales del año pasado se bautizó y obtuvo su licencia de ministro, algo que ha cambiado su forma de entender su fe y propósito, después de años de sentir que hablaba al mundo a través de su trabajo actoral. Relató una profecía que le hicieron en 1975 en el salón de belleza de su madre, cuando atravesaba un momento difícil tras dejar la universidad, y cómo siente que esa profecía se está cumpliendo.

Aunque no sabe si llegará el día en que se dedique exclusivamente al ministerio, reconoce una conexión profunda entre la iglesia y el teatro, pues ambos son espacios donde la gente vive una experiencia comunitaria y compartida.

Sobre su regreso a Broadway con Otelo, expresó que actuar en el escenario es lo que más felicidad le da, a diferencia del cine. También reflexionó sobre la importancia de poner las cosas en perspectiva, considerando los problemas actuales en el mundo y en su ciudad.

En cuanto a los incendios en California, se mostró impresionado por la devastación y el impacto en la industria, pero descartó la idea de mudarse.

Habló también de cómo ser padre cambió su perspectiva del trabajo y las preocupaciones cotidianas, como la educación y gastos de sus hijos. Al tocar el tema del arte y el negocio, confesó que ha aceptado trabajos por dinero, especialmente al principio, pero que su verdadera motivación siempre ha sido su pasión por la actuación.

Sobre sus hijos, contó que ellos empezaron en la actuación incluso antes de que él supiera, y destacó el talento artístico de su esposa Pauletta, quien además de actriz es cantante y pianista, habiendo participado en concursos prestigiosos como el Van Cliburn.

Finalmente, Washington habló con franqueza sobre un periodo de amargura vinculado a su relación con el alcohol, reconociendo que no tiene una explicación clara de por qué bebía, pero que dejó ese hábito en 2014.

En resumen, la entrevista reveló a un Denzel Washington profundo, honesto y complejo, no solo en su arte sino en su vida personal y espiritual.

 

comentar nota

ESPECTACULOS: Tomorrowland 2025 abrió sus puertas: así fue el arranque del festival.

El icónico festival de música electrónica Tomorrowland celebra su décima novena edición reuniendo a más de 400,000 personas provenientes de diferentes rincones del planeta en Bélgica. El evento se realiza en dos fines de semana consecutivos, del 18 al 20 y del 25 -- leer más

Noticias del tema


    Más leído en la semana