Diciembre no detiene decisiones: hospital mantiene abortos seguros
Hospital continúa atención de abortos en diciembre y reporta casos recientes en los primeros días.
En el Hospital Amparo Pape de Benavides, diciembre llega con luces, abrazos y reencuentros, pero también con decisiones íntimas que cambian vidas. Mientras algunas mujeres celebran futuros nacimientos, otras toman una decisión igualmente significativa: continuar o interrumpir un embarazo. Algunas acompañadas, otras con dudas y temores, y otras más con la serenidad de elegir por sí mismas. El hospital ha iniciado el mes atendiendo casos de interrupción voluntaria del embarazo, y cifras recientes muestran que solo en septiembre se registraron 34 procedimientos, aunque en otros meses el número ha alcanzado entre 45 y 50.
El mensaje del hospital es claro: el calendario no determina las decisiones personales y tampoco suspende la atención. Las mujeres siguen llegando, buscando acompañamiento y seguridad en un momento vulnerable. En los primeros días de diciembre ya se presentaron casos, reflejo de una realidad que continúa aún en medio del ambiente festivo.
Un programa que permanece abierto para quien lo necesita.
El director del hospital, Ángel García, explicó que la interrupción voluntaria del embarazo forma parte de un programa federal activo durante todo el año. Solo se detiene por días festivos o vacaciones del personal especializado, nunca por falta de recursos o porque “se termine” el servicio. Esta continuidad no solo responde a una obligación institucional, sino a una prioridad de salud pública: evitar que mujeres recurran a procedimientos clandestinos que ponen en riesgo su vida. El hospital busca ofrecer una opción segura, legal y accesible.
Cambios en la forma de decidir.
García señaló que, con el paso del tiempo, las mujeres se acercan con mayor claridad y convicción. Ya no solo por curiosidad ante un programa nuevo, sino después de hablarlo con su pareja o familia y valorar lo que implica. En el proceso, alrededor del 50% regresa para llevar a cabo el procedimiento y el otro 50% no. El hospital no juzga, no persuade ni desanima: su papel es brindar información, acompañamiento médico y un espacio seguro para decidir.
Un método que prioriza seguridad y acompañamiento.
El procedimiento aplicado es no invasivo, pero requiere vigilancia médica constante. El hospital mantiene monitoreo 24/7 con acceso inmediato a atención hospitalaria en caso de alguna complicación. Más allá de lo técnico, esto representa algo humano: saber que, aunque la decisión sea difícil, no se está sola ni desprotegida.
Confidencialidad y respeto.
El programa opera bajo estrictos protocolos de confidencialidad, por lo que no se difunden datos personales, edades ni motivos. El servicio se ofrece de lunes a viernes de 8:00 a 12:30 horas. Mientras el año se prepara para cerrar, el hospital reafirma que la interrupción del embarazo no es un método de planificación, pero tampoco una elección que deba ocultarse o vivirse en soledad. En un mes cargado de simbolismos, el hospital recuerda que también hay lugar para decisiones difíciles, legítimas y profundamente humanas.
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