Entrevista con Monica Nicolette Salazar Ayala

"Las ideas valen poco si no se ejecutan; el verdadero valor está en atreverse a empezar."

¿Eres originaria de dónde? Soy originaria de Nueva Rosita, un lugar que me ha visto crecer y donde he aprendido mucho tanto en lo personal como en lo profesional. Me encanta esta comunidad porque, a pesar de ser pequeña, tiene mucho potencial y gente trabajadora que siempre busca salir adelante. Crecer aquí me dio la oportunidad de conocer mis raíces y valorar el esfuerzo que implica construir algo propio, lo cual es fundamental para cualquier emprendimiento.

¿Qué estudiaste y dónde? Estudié la carrera de Recursos Humanos en la Universidad Autónoma del Noreste, que está ubicada en Sabinas,Coahuila. Fue una experiencia muy enriquecedora porque aprendí a entender la parte humana dentro de las organizaciones, cómo motivar, seleccionar personal y manejar conflictos, entre otras cosas. Terminé hace dos años y aunque no he ejercido formalmente en mi área, los conocimientos que adquirí me han ayudado muchísimo en la gestión de mi propio negocio, especialmente en la parte de atención al cliente y manejo del equipo.

¿A qué te has dedicado profesionalmente? Principalmente a la pastelería. Desde los 15 años comencé a ayudar a mi mamá en su pastelería, y esa experiencia me fue enamorando poco a poco de este mundo dulce y creativo. Este año decidimos emprender un proyecto juntas, que es "Bocato", una barra de pasteles que también ofrece servicio de cafetería y atención para eventos. Me apasiona la idea de darle un giro innovador a un negocio tradicional, y por eso optamos por una propuesta original que brinda al cliente la oportunidad de elegir y personalizar su pastel, algo que no se ve comúnmente en nuestra región.

¿En qué consiste exactamente "Bocato"? "Bocato" es una barra de pasteles donde el cliente puede seleccionar entre diferentes sabores, ingredientes y toppings para crear su pastel individual a su gusto. Ofrecemos una variedad de harinas como vainilla, chocolate, plátano, zanahoria, red velvet y marmoleado. Además, contamos con diferentes betunes como queso Philadelphia y chocolate. Tenemos alrededor de 12 toppings variados, y cada persona puede elegir dos para acompañar su pastel. También ofrecemos jarabes para darle un toque extra y bebidas como café americano, ya sea caliente o helado, café latte y aguas frescas. La idea es que la experiencia sea fresca, personalizada y única, tanto para el consumo en el lugar como para eventos especiales como bodas, graduaciones o fiestas.

¿Cómo surgió la idea de este negocio? La idea nació porque ya teníamos una pastelería familiar, pero queríamos darle un giro completamente diferente y romper con el concepto tradicional. Pensamos que hacer una barra donde el cliente tenga la oportunidad de interactuar y decidir al momento cómo quiere su pastel era algo original y novedoso para la zona. Además, queríamos un espacio que fuera acogedor y que pudiera adaptarse a diferentes eventos y temporadas, ya sea invierno o verano, para que todos puedan disfrutar de un postre fresco y hecho a su medida.

¿Dónde están ubicados y qué horarios manejan?
Estamos ubicados en Nueva Rosita, en la colonia Independencia, en avenida Puebla 2319. Abrimos todos los días de domingo a viernes en un horario de cinco y media de la tarde a nueve y media de la noche. Además de la venta directa en nuestro punto, ofrecemos servicio personalizado para eventos, lo que nos permite estar muy cerca de nuestros clientes y atender sus necesidades de manera más específica y detallada.

¿Cómo te preparas cada día para atender a los clientes? La preparación es clave para ofrecer un buen servicio. Cada día empiezo haciendo el inventario, surtimos todo lo necesario para la barra, preparo las recetas y me pongo el uniforme. Después instalo toda la barra cuidadosamente para que todo esté perfecto al momento de abrir. Horneo y preparo los pasteles con mucha dedicación, siempre cuidando la calidad y frescura de cada ingrediente. La atención personalizada también es fundamental, por eso nos enfocamos en escuchar al cliente para que pueda crear el pastel de sus sueños, y así se sienta contento y satisfecho.

¿Qué te motivó a emprender y salir adelante con este negocio? Me motivó la originalidad de la idea y la oportunidad de ofrecer algo diferente en nuestra comunidad. Creo que el hecho de poder darle al cliente una experiencia fresca, personalizada y única es muy valioso. Además, siento que este tipo de negocio se adapta a todo tipo de eventos, desde fiestas infantiles hasta bodas y graduaciones, lo que nos da mucha versatilidad y posibilidades de crecimiento. También me inspira estar cerca de la gente, conocer sus gustos y ver cómo disfrutan de un producto hecho con pasión. Eso me impulsa a seguir aprendiendo y mejorando cada día.

¿Hay alguna frase o consejo que te guste compartir con nuevas generaciones? Sí, una frase que me ha servido mucho y que me gustaría compartir es: "Las ideas valen poco si no se ejecutan; el verdadero valor está en atreverse a empezar." Creo que muchas veces las personas tienen buenas ideas, pero se quedan en el pensamiento sin dar el paso para hacerlas realidad. Atreverse a iniciar, a equivocarse y a aprender es fundamental para cualquier emprendimiento o proyecto de vida.

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