El Club América ya ha designado a su nuevo portador del icónico número 10. Tras la salida del mediocampista chileno Diego Valdés, el emblemático dorsal será utilizado por Alejandro Zendejas, atacante que ha sido una de las piezas más desequilibrantes del equipo en los torneos recientes.
Zendejas toma el relevo del '10' azulcrema
La noticia fue compartida por medio de un video en redes sociales, donde el club destacó el peso simbólico del dorsal: “El 10 no es un número cualquiera, se porta con orgullo y se lucha por representarlo dando el máximo”. En el video, Zendejas aparece usando por primera vez la camiseta con su nuevo número, reflejando la emoción por el reconocimiento.
El jugador expresó: “No sé en qué momento pasó, pero ahora me toca a mí... Es algo muy especial, no es un número cualquiera y estoy muy feliz”. Hasta la temporada pasada, Zendejas vestía el número 17, pero ahora ocupará un lugar que alguna vez perteneció a leyendas del club como Cuauhtémoc Blanco, Salvador Cabañas, Osvaldo Martínez, Eduardo Bacas y Diego Valdés.
Reconocimiento a su talento y liderazgo
El futbolista mexicano-estadounidense, de 26 años, ha sido fundamental en el sistema ofensivo de las Águilas desde su llegada, destacándose por su habilidad, movilidad y capacidad de marcar goles clave. Este cambio de número refleja la confianza del cuerpo técnico y la directiva en su papel como líder dentro del equipo.
Zendejas también aprovechó para dirigirse a los aficionados: “Perdón a toda la gente que compró mi jersey con el 17, pero se los agradezco. Espero que me sigan apoyando en esta nueva etapa y ojalá pueda conservar este número mucho tiempo”.
Estreno del dorsal y el reto que viene
El debut oficial de Zendejas con el número 10 será en un amistoso frente a Puebla, el próximo fin de semana en el Estadio Ciudad de los Deportes, donde se espera un gran respaldo de la afición capitalina.
Esta designación va más allá de un simple cambio de número: representa el rol protagónico que Zendejas asumirá en esta nueva era del América rumbo al Apertura 2025. La responsabilidad es alta, pero el atacante ya dio el primer paso: aceptar con compromiso y entusiasmo uno de los dorsales más emblemáticos del fútbol mexicano.