Fugas de agua en el IMSS por obra mal ejecutada en block A

Goteras y humedad afectan áreas sensibles de ginecología y obstetricia desde hace más de 24 horas.

La Clínica 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Monclova enfrenta un problema que ha afectado tanto a trabajadores como a pacientes: múltiples goteras y filtraciones que persisten desde hace más de 24 horas.

De acuerdo con personal de la institución, fue el pasado martes, poco después del mediodía, cuando albañiles que trabajan en la remodelación del quinto piso del bloque A rompieron una tubería de agua, provocando una fuga que rápidamente afectó distintos niveles del edificio.

Áreas sensibles bajo riesgo

Las filtraciones han impactado de manera particular el segundo piso, donde se encuentran las áreas de ginecología, obstetricia y alojamiento conjunto. En estas zonas se atienden mujeres embarazadas, recién nacidos y pacientes con tratamientos delicados, por lo que la presencia constante de humedad y goteras representa un riesgo sanitario y operativo.
Trabajadores del nosocomio, que solicitaron el anonimato por temor a represalias, reportaron que la fuga no solo afecta llaves de agua, sino que también el líquido ha comenzado a escurrir por paredes y hasta por conectores eléctricos, provocando fallas en enchufes y aparatos.

Denuncias respaldadas con evidencia

Pacientes y empleados han difundido imágenes y videos en los que se observan chorros de agua cayendo desde el techo y acumulándose en charcos sobre el piso. En algunos puntos, la humedad ha inhabilitado equipos y forzado a reubicar mobiliario para evitar daños mayores.
El personal teme que la situación pueda derivar en cortocircuitos o en la suspensión de servicios, lo que complicaría aún más la atención a derechohabientes.

Llamado a una solución inmediata

Ante la situación, trabajadores y pacientes exhortaron a la dirección del IMSS a contratar personal calificado para concluir la obra de remodelación, ya que consideran que las deficiencias actuales son producto de una mala ejecución. También pidieron una respuesta rápida y efectiva en este tipo de emergencias, con la inversión de recursos suficientes para reparar daños y prevenir riesgos. 

Un hospital en remodelación y bajo presión

Cabe recordar que la torre A de la Clínica 7 actualmente atiende también a pacientes que llegan por urgencias, debido a que la torre B se encuentra en trabajos de modernización. Esto ha incrementado la carga operativa en el edificio afectado por la fuga, dificultando aún más la labor médica.
Mientras tanto, la humedad continúa filtrándose, y el personal de salud intenta mantener la atención sin que las condiciones afecten la calidad y seguridad de los servicios.

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