Golpe de calor en oficinas: IMSS advierte riesgos y comparte medidas clave de prevención

Frente a las altas temperaturas que afectan a gran parte del país, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) emitió recomendaciones específicas para quienes laboran en oficinas, con el fin de prevenir golpes de calor, deshidratación y otros efectos nocivos en la salud.

Entre las sugerencias se incluye mantener una hidratación constante, vestir ropa ligera, asegurar una buena ventilación en el espacio de trabajo y utilizar cortinas o plantas para disminuir el calor al interior.

El doctor Gabriel Alejandro Real Ornelas, experto en toxicología y salud ambiental del IMSS, advirtió que el calor excesivo en espacios cerrados puede afectar negativamente la productividad, generar fatiga mental y provocar síntomas como mareo, náuseas y confusión. Además, incrementa el riesgo de estrés y otros problemas psicosociales.

El especialista explicó que temperaturas superiores a los 30 °C impactan tanto el rendimiento intelectual como el bienestar emocional. Por ello, se recomienda hacer pausas breves de cinco minutos cada 45 o 60 minutos para permitir la recuperación del cuerpo y prevenir el agotamiento.

En cuanto a la hidratación, el IMSS sugiere consumir entre 2 y 2.5 litros de agua durante una jornada laboral de ocho horas. En condiciones más calurosas o en caso de realizar actividades físicas, esta cantidad puede aumentar hasta un litro por hora.

Para mantener frescas las oficinas sin depender únicamente del aire acondicionado, el Instituto aconseja:

• Usar ropa clara, holgada y de tejidos como algodón o lino.

• Crear ventilación cruzada abriendo ventanas en lados opuestos del espacio.

• Mantener cerradas cortinas o persianas en las horas más calurosas.

• Colocar plantas como la palmera areca, el ficus o la cuna de Moisés, que refrescan el ambiente gracias a la evapotranspiración.

El doctor Real Ornelas señaló que en oficinas sin buena ventilación, la temperatura interior puede superar en hasta 7 °C la del exterior, debido a la acumulación de calor solar, el uso de dispositivos electrónicos y la cantidad de personas presentes.

Durante abril y mayo de 2024, la Ciudad de México rompió récords de temperatura. En abril se alcanzaron los 34.2 °C y en mayo, se superó esa cifra en tres ocasiones, llegando hasta los 34.7 °C. Esto contrasta con los valores habituales de entre 26 y 28 °C para la época. Estos episodios de calor extremo, cada vez más frecuentes, motivaron al IMSS a impulsar su programa Entornos Laborales Seguros y Saludables (ELSSA), que brinda formación y herramientas para crear espacios laborales adaptados al cambio climático.

El IMSS también pidió estar atentos a síntomas como sudoración excesiva seguida de piel seca, fatiga intensa, fiebre, náuseas o desorientación. Ante estos signos, se debe interrumpir la actividad, descansar en un sitio fresco, hidratarse y buscar atención médica si es necesario.

Finalmente, el doctor Real Ornelas advirtió que el calor prolongado no solo afecta físicamente, sino que también puede alterar el estado de ánimo, generando irritabilidad, ansiedad y una sensación de sobrecarga laboral.

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