Importaciones de acero chino presionan industria latinoamericana

El excedente de acero chino, con subsidios estatales, inunda Latinoamérica. La industria local denuncia competencia desleal y pérdida de empleos.
La creciente importación de acero de China, respaldada por subsidios gubernamentales, genera una competencia desleal que presiona a la industria siderúrgica latinoamericana, amenaza miles de empleos y frena inversiones, justo cuando la región necesita insumos para infraestructura. Datos oficiales y líderes sectoriales alertan sobre un riesgo de desindustrialización.
El excedente chino y un campo de juego desigual
Según la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero), el problema central es el exceso de capacidad productiva de China, que en 2024 superó los 249 millones de toneladas disponibles para exportación. Ezequiel Tavernelli, presidente de Alacero, describe una competencia asimétrica: "No estamos compitiendo más empresas con empresas, estamos compitiendo empresas contra un Estado". Tavernelli detalla un complejo sistema de subsidios chinos en materia prima, financiación y tasas que distorsionan los precios internacionales.
Impacto concreto en los mercados latinoamericanos
Las cifras reflejan la magnitud del fenómeno. El 39.7% del acero consumido en Latinoamérica es importado, y de ese total, China representa el 45.4%. Solo entre enero y octubre de 2025, las exportaciones chinas de acero y sus derivados a Brasil sumaron 3,323 millones de dólares, a Chile 1,612 millones y a Argentina 345 millones.
Este flujo tiene consecuencias directas. En Brasil, las importaciones récord, con un 64% de origen chino, llevaron a la imposición de un arancel del 25% hasta 2026. El Instituto Acero Brasil reporta pérdida de más de 5,000 empleos y recortes inversiones por 450 millones de dólares. En Chile, la presión competitiva contribuyó al cierre definitivo de la siderúrgica Huachipato en 2024. Argentina, por su parte, vio superadas sus importaciones de acero chino de todo 2024 en los primeros diez meses de 2025, en un contexto donde el sector metalúrgico perdió unos 20,000 puestos de trabajo.
Respuestas arancelarias y cambio de estrategia china
Frente a esta situación, varios gobiernos han reaccionado. México impone aranceles de hasta el 50% a productos siderúrgicos chinos, Colombia aplica gravámenes del 30% y Brasil el 25%. Tavernelli advierte, sin embargo, que la estrategia china evolucionó: ya no solo exporta acero directo, sino acero indirecto incorporado en manufacturas como electrodomésticos y vehículos eléctricos, lo que profundiza el riesgo de desindustrialización.
El líder industrial plantea la necesidad de una defensa arancelaria coordinada en la región, similar a la de EE.UU. o la Unión Europea, para nivelar las condiciones de competencia y proteger la capacidad productiva local en un momento de creciente demanda de infraestructura.
Noticias del tema