Incrementan ventas en el centro de la ciudad
Las vacaciones de los estudiantes en Estados Unidos y la celebración del 4 de julio dejaron una derrama considerable.
Saldo positivo para los comerciantes del primer cuadro de la ciudad, quienes reportaron un incremento significativo en sus ventas, como resultado de la afluencia registrada durante los días de asueto en los Estados Unidos con motivo de la celebración del 4 de julio, fecha que se ha consolidado como una de las más importantes en materia de actividad comercial para esta zona fronteriza.
Héctor Portillo, presidente de la Unión de Locatarios del Mercado Zaragoza, informó que durante el periodo festivo se registró un incremento del 30 por ciento en las ventas, una cifra que, si bien no alcanzó las expectativas más optimistas, representa un respiro económico para los negocios locales que dependen en gran medida del turismo proveniente del país vecino.
“La gente sí cruzó, aunque no en los números que se esperaban. Aun así, logramos recuperar terreno y tener ingresos importantes”, expresó el representante del sector comercial. Subrayó que, pese a los factores adversos, lograr ingresos extra en una temporada estratégica es vital para la operación y mantenimiento de los negocios que conforman el corazón económico de la ciudad.
Uno de los factores que, a juicio de Portillo, afectó parcialmente la derrama esperada fue el temor generalizado sobre posibles restricciones migratorias en el cruce de regreso hacia Estados Unidos. Rumores en redes sociales y la difusión de información no confirmada generaron un ambiente de incertidumbre, lo cual influyó en la decisión de muchas familias de no visitar México en estos días.
A pesar de esta situación, los comerciantes coinciden en que el movimiento fue mejor al de semanas anteriores y permitió dinamizar varios giros económicos, como el de alimentos preparados, artículos de temporada, ropa, calzado y recuerdos. Restaurantes, fondas, tiendas de abarrotes y locales del mercado tradicional fueron los más beneficiados.
La llegada de familias texanas a la ciudad generó un ambiente más activo en las calles del centro, lo que se tradujo en un flujo continuo de visitantes, compras y consumo en negocios establecidos. Aunque el tráfico vehicular no fue tan denso como en años anteriores, el comportamiento de los compradores fue considerado favorable, con estancias más largas y mayor disposición al gasto.
Este tipo de fechas representa una oportunidad importante para fortalecer la economía local, especialmente en un contexto donde los pequeños negocios enfrentan presiones como el alza de insumos, la competencia de plataformas digitales y la lenta recuperación económica tras la pandemia.
Portillo también mencionó la importancia de que las autoridades y el sector privado sigan trabajando en conjunto para mejorar la imagen urbana, la seguridad y los servicios en el centro histórico, factores clave para seguir atrayendo visitantes. Agregó que la limpieza, el orden y la promoción turística son elementos que pueden potenciar aún más las temporadas altas y generar un impacto más sostenido en el tiempo.
De cara a las próximas fechas de alta afluencia, como el Día del Trabajo en Estados Unidos (Labor Day), los locatarios ya preparan estrategias para mantener el interés del consumidor extranjero, tales como promociones, ampliación de horarios y mejoras en la atención al cliente.
La experiencia de este fin de semana refuerza la idea de que, con constancia y organización, el centro de la ciudad puede mantenerse como un punto de referencia para el comercio y el turismo regional. La cercanía geográfica con Texas, sumada a la oferta cultural y gastronómica que se concentra en la zona, representa una ventaja competitiva que debe seguirse aprovechando.
Finalmente, Héctor Portillo hizo un llamado a la comunidad local para seguir apoyando al comercio establecido, ya que este representa una fuente de empleo directa e indirecta para cientos de familias. “Cada compra que se hace aquí, en el mercado o en las tiendas del centro, tiene un impacto real en la economía de nuestra ciudad”, puntualizó.
Con miras al segundo semestre del año, los comerciantes del centro se preparan para enfrentar nuevos retos, apostando por el trabajo en equipo, la adaptación y la confianza en el valor de lo local como elementos clave para seguir generando movimiento y oportunidades.
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