Jair Bolsonaro sigue bajo observación tras ingreso hospitalario
Jair Bolsonaro sigue en observación en un hospital de Brasilia por problemas renales y anemia tras dejar prisión preventiva. Su estado de salud es delicado.
El expresidente Jair Bolsonaro, condenado a 27 años por intento de golpe, permanece en hospital de Brasilia por problemas renales, anemia y complicaciones médicas previas.
El expresidente brasileño Jair Bolsonaro ingresó el martes al hospital DF Star en Brasilia tras dejar su prisión domiciliaria preventiva, después de sentirse mal, informó el centro de salud. La familia confirmó que Bolsonaro pasó la noche en observación.
Según el boletín médico, el exmandatario llegó “deshidratado, con elevación de la frecuencia cardíaca y caída de la presión arterial”. Los exámenes revelaron persistencia de anemia y alteración de la función renal, y continuará bajo vigilancia para determinar si requiere hospitalización prolongada.
Antecedentes de salud
Bolsonaro ha reportado frecuentes malestares, incluyendo vómitos e hipos crónicos, algunos derivados del ataque con cuchillo durante la campaña electoral de 2018. El domingo ingresó para una intervención quirúrgica menor por lesiones en la piel, durante la cual se diagnosticó anemia.
Condena histórica por golpismo
La Corte Suprema de Brasil condenó la semana pasada a Bolsonaro a 27 años de prisión por liderar una organización criminal que intentó aferrarse al poder tras perder las elecciones de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva.
El exmandatario no participó en las últimas sesiones del juicio debido a sus problemas de salud, según sus abogados, lo que complicó el seguimiento de su defensa ante el tribunal.
Implicaciones políticas
El ingreso hospitalario de Bolsonaro ocurre en un momento de alta tensión política en Brasil, luego de una condena histórica por golpismo, y mientras el país sigue atento a la evolución médica del exmandatario y sus posibles repercusiones legales y políticas.
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