Lo diagnosticaron con estreñimiento… y perdió un testículo
Un hospital de Murcia y una aseguradora deberán indemnizar con 38 mil euros a los padres de un menor mal diagnosticado con estreñimiento.
La Audiencia Provincial de Murcia ratificó la sentencia que obliga a un centro hospitalario y a su entidad aseguradora a pagar 38.000 euros de indemnización a los padres de un menor. El menor perdió un testículo como consecuencia de un diagnóstico erróneo: fue atendido inicialmente por dolor abdominal y lumbar, síntomas que los médicos asociaron a un caso de estreñimiento.
La situación, sin embargo, correspondía a una torsión testicular, una condición de urgencia médica que requiere intervención inmediata para evitar la pérdida del órgano afectado. La falta de una exploración exhaustiva en la primera y segunda visita a urgencias fue determinante para el desenlace.
Según la resolución judicial, a la que tuvo acceso la agencia EFE, los médicos no realizaron las pruebas necesarias para descartar una torsión testicular, pese a que el menor volvió al hospital al día siguiente por el empeoramiento de su estado.
La justicia desestima el recurso y confirma la negligencia
La defensa del hospital y la aseguradora alegó que se practicaron “todas las pruebas pertinentes” durante las dos visitas médicas y que el menor nunca refirió dolor testicular, inguinal o escrotal. No obstante, el tribunal consideró que, dada la persistencia del malestar, se debieron extremar las medidas diagnósticas, incluyendo una exploración detallada.
La Audiencia concluyó que el retraso en el diagnóstico derivó en la pérdida traumática del testículo, por lo que desestimó el recurso interpuesto y ordenó el pago de las costas judiciales a los apelantes.
Casos similares revelan fallos recurrentes en diagnósticos
Este no es un caso aislado. En abril, un juzgado de Galicia también condenó al servicio de salud pública a indemnizar con 35.000 euros a un joven de 24 años que perdió el testículo derecho por un retraso en el diagnóstico de una torsión testicular. En ese caso, la intervención ocurrió cuatro días tarde, cuando ya se encontraba en estado irreversible.
Estas resoluciones ponen el foco en la necesidad de mejorar los protocolos de evaluación clínica ante síntomas abdominales o lumbares en pacientes varones, ya que la torsión testicular es una urgencia médica tiempo-dependiente.
Urge reforzar protocolos ante urgencias pediátricas
Los fallos médicos por diagnósticos tardíos o inadecuados pueden tener consecuencias permanentes. Especialistas recomiendan que ante dolor abdominal en varones jóvenes, se incluya rutinariamente la evaluación testicular para descartar torsiones, las cuales pueden generar pérdida irreversible del órgano en pocas horas.
El caso de Murcia subraya la necesidad de una formación médica continua y de reforzar la cultura de prevención clínica, tanto en hospitales públicos como privados.
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