El infectólogo Francisco Moreno Sánchez, del Centro Médico ABC, señala que aunque esta mutación está catalogada actualmente como de bajo riesgo para la salud pública mundial según la Organización Mundial de la Salud (OMS), presenta una alta capacidad de contagio y puede evadir más fácilmente la inmunidad que generan infecciones previas o vacunas anteriores.
¿Qué distingue a la variante LP.8.1? Detectada por primera vez en febrero de 2025, la LP.8.1 forma parte del grupo L de variantes del covid-19 y está siendo monitoreada por las autoridades sanitarias internacionales.
Según la OMS, su rápida propagación en algunas regiones y su potencial impacto en grupos vulnerables son motivo de preocupación.
“El virus ha evolucionado para evitar mejor la respuesta inmune, por lo que, incluso si estás vacunado, es más probable que te contagies”, explicó el Dr. Moreno en una entrevista para MILENIO.
Síntomas comunes sin características específicas
Aunque la variante LP.8.1 puede ser más contagiosa, sus síntomas no difieren mucho de los de cepas anteriores. Los más habituales incluyen:
El especialista aclaró que no existen síntomas que permitan identificar clínicamente esta variante sin realizar pruebas de laboratorio.
Riesgos para la salud: covid prolongado y daños a órganos
El mayor riesgo asociado a esta variante afecta a personas con enfermedades previas como diabetes, hipertensión, obesidad, problemas cardíacos o pulmonares, así como a adultos mayores. En estos casos, el virus puede replicarse más intensamente y provocar complicaciones serias como:
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Neumonía
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Insuficiencia cardíaca
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Daños en otros órganos
“La población vulnerable corre más riesgo porque su sistema inmunológico no elimina el virus rápidamente, lo que puede ocasionar consecuencias fatales”, enfatizó el Dr. Moreno.
¿Se desarrollará una vacuna específica para la LP.8.1?
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) ya recomendó actualizar las vacunas contra covid-19 para la temporada 2025-2026, tomando en cuenta la variante LP.8.1, que se perfila como la cepa predominante a nivel mundial.
Aunque todavía no hay una vacuna específica disponible para esta variante, el Dr. Moreno indicó que ya se está trabajando en su desarrollo con tecnología de ARN mensajero, y se espera que esté lista para finales de 2025.
“Uno de los principales retos para el sistema de salud en México será asegurar el acceso gratuito y oportuno a esta vacuna, especialmente para quienes más la requieren”, añadió.