NFL: ¿Cuál es el mejor cuerpo de entrenadores de los 32 equipos?

Imposible decir quien es el mejor entrenador de la NFL
Medir la calidad de un entrenador es difícil. Más allá del récord de victorias y derrotas, no hay estadísticas. Tampoco victorias por encima del reemplazo ni victorias ajustadas; solo victorias, derrotas y alguno que otro empate.
Por lo tanto, juzgar la calidad de un cuerpo técnico es en gran medida un ejercicio de anécdotas e inferencias. No es difícil inferir que Kyle Shanahan es un excelente entrenador ofensivo: tenemos las estadísticas de sus ofensivas, y sin duda tenemos muchas. Pero descifrar las de Nick Caley (coordinador debutante), Mike McDaniel (excelente solo con su mariscal de campo titular) y Kevin O'Connell (increíble sin su mariscal de campo titular) es mucho más complejo.
Luego están las cosas que suceden a puerta cerrada: la gestión del vestuario, la formación del cuerpo técnico, la elaboración de los planes de juego. No puedo decirles exactamente qué sucedió en el vestuario de los Eagles durante los últimos dos años, pero sí puedo decirles que Nick Sirianni se ha esforzado por mantener la cohesión del equipo y merece su reconocimiento. Todavía no puedo decirles qué tan buenas serán las nuevas contrataciones de coordinadores de Dan Campbell, pero sí puedo asegurarles que se ha ganado la reputación de ser un gran formador de entrenadores. De nuevo, no podemos medir esto realmente. Solo tenemos que evaluar la vibra.
Con las limitaciones del ejercicio en mente, aquí hay algunas consideraciones adicionales:
Contratar a un entrenador jefe de élite con un buen manejo de jugadas ofensivas es la meta. Normalmente intento hacer clasificaciones como estas sin un enfoque específico, pero es inevitable la atracción gravitatoria de un entrenador jefe de élite. Quien dirige las jugadas ofensivas de un equipo quizá no sea el aspecto más importante del esfuerzo colectivo del cuerpo técnico, pero sin duda es el más fácil de medir desde fuera. Conseguir un buen entrenador como entrenador en jefe es la manera más sencilla de asegurar un cuerpo técnico funcional.
En particular, en el caso de diseñadores ofensivos de élite, como Sean McVay o Shanahan, sabemos que pueden sortear las deficiencias de talento de una forma que pocos de sus colegas pueden; eso tiene un efecto enorme y transformador. Es una verdad evidente: O'Connell ganó el premio al Entrenador del Año la temporada pasada por algo.
El coordinador de equipos especiales y (la mayoría de) los entrenadores de posición no tienen influencia en este caso. No es que no influyan en la temporada de un equipo, ¡por supuesto que sí! Es simplemente imposible crear una clasificación justa de coordinadores de equipos especiales desde fuera, ya que nuestros datos sobre equipos especiales son muy limitados y la falta de visibilidad pública sobre el rol dificulta aún más la elaboración de una clasificación.
De igual manera, estoy seguro de que hay un excelente entrenador de receptores abiertos (y uno peor, y uno que ocupa el puesto número 19), pero no puedo hacer esa clasificación de forma justa, así que intenté evitarla por completo. Hay algunos entrenadores de posición que son tan valiosos para su equipo, y lo han sido a lo largo de los años (como el entrenador de línea ofensiva de los Eagles, Jeff Stoutland, y el entrenador de línea defensiva de los 49ers, Kris Kocurek), que su presencia se incluyó en la clasificación. Pero principalmente como criterio de desempate, y solo cuando su valor era evidente.
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