Ozempic puede tratar la enfermedad del hígado graso

Un reciente ensayo clínico ha demostrado que el medicamento semaglutida, utilizado para perder peso bajo los nombres comerciales de Ozempic y Wegovy, puede detener e incluso revertir la enfermedad del hígado graso.

El estudio reveló que un 63 % de los pacientes que tomaron semaglutida vieron mejoras en su condición hepática, sin presentar más cicatrices, en comparación con un 34 % de los que recibieron un placebo, según los resultados publicados el 30 de abril en la revista New England Journal of Medicine.

La enfermedad del hígado graso, también conocida como esteatohepatitis asociada a la disfunción metabólica (MASH), afecta a aproximadamente 15 millones de estadounidenses, es decir, 1 de cada 20 adultos. Los investigadores destacaron que los resultados del ensayo aportan evidencia sólida de que la semaglutida no solo mejora la salud del hígado, sino que también aborda los problemas metabólicos subyacentes que contribuyen a la enfermedad.

El MASH ocurre cuando se acumula grasa en el hígado, lo que causa inflamación y cicatrices. Esta condición está relacionada con la obesidad, la diabetes tipo 2, los niveles elevados de colesterol y la hipertensión. La semaglutida actúa imitando la hormona GLP-1, que regula la insulina, controla el azúcar en la sangre, reduce el apetito y ralentiza la digestión.

En el estudio, se reclutaron 800 participantes de 37 países que tenían cicatrices hepáticas moderadas a graves debido al hígado graso, y aproximadamente dos tercios de ellos recibieron semaglutida durante 72 semanas. Los resultados mostraron que el 37 % de los pacientes tratados con semaglutida experimentaron una reducción de las cicatrices hepáticas, en comparación con el 23 % en el grupo placebo.

En general, alrededor de un tercio de los pacientes que tomaron semaglutida lograron una mejora tanto en la inflamación como en las cicatrices hepáticas, más del doble que los que recibieron el placebo. Además, la semaglutida ayudó a los pacientes a perder peso, mejorar su función hepática y beneficiar su salud cardiovascular en general.

El Dr. Arun Sanyal, investigador principal del estudio, expresó que la semaglutida ofrece un enfoque prometedor para millones de pacientes al tratar la enfermedad hepática y sus causas metabólicas. Actualmente, el único tratamiento aprobado por la FDA para la enfermedad del hígado graso es Rezdiffra (resmetirom), que actúa reduciendo la acumulación de grasa en el hígado a través de un receptor hormonal.

Novo Nordisk, el fabricante de semaglutida, planea solicitar la aprobación de la FDA para el uso de este medicamento en el tratamiento de la enfermedad del hígado graso a finales de este año.