Policía de Piedras Negras lidera quejas ante CDHEC
La Comisión de Derechos Humanos de Coahuila reportó 23 quejas en mayo en Piedras Negras, encabezadas por presuntos abusos
La Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Coahuila (CDHEC) recibió 23 quejas formales en mayo en su oficina regional de Piedras Negras, acumulando 101 denuncias en lo que va del año. La policía municipal encabeza la lista de autoridades señaladas, con siete casos reportados por presuntas violaciones a derechos fundamentales, según cifras oficiales proporcionadas por la comisión.
Según datos emitidos por la tercera visitaduría de la CDHEC en Piedras Negras, la policía municipal figura como la corporación con mayor número de quejas ciudadanas durante el mes de mayo con 7, seguida por la policía de investigación (3 quejas), el Ministerio Público (2 quejas) y el sector educativo (2 quejas), declaró Manuel López, tercer visitador de la Comisión.
En lo que va de 2025, la CDHEC ha recibido un total de 101 quejas solo en esta región, lo que representa una media mensual superior a las 20 denuncias. A nivel estatal, se reportan más de 1,000 quejas acumuladas, lo cual refleja una tendencia preocupante en el respeto a los derechos humanos por parte de instituciones públicas.
Principales violaciones reportadas
Las causas más comunes en las que los ciudadanos aseguran haber visto vulnerados sus derechos son:
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Ejercicio indebido de la función pública (10 casos)
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Detención arbitraria (8 casos)
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Prestación indebida del servicio público (5 casos)
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Lesiones (2 casos)
Estas violaciones no solo representan una infracción legal, sino también un daño a la confianza ciudadana en las instituciones encargadas de proteger el orden, la justicia y el bienestar de la población.
El papel de la CDHEC en Coahuila
La Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Coahuila es el organismo autónomo encargado de vigilar el cumplimiento de los derechos fundamentales de los ciudadanos ante actos u omisiones de autoridad. Las quejas se analizan mediante visitadurías, como la de Piedras Negras, que remite los expedientes a las áreas correspondientes para su valoración.
Una queja no implica de forma automática la culpabilidad de una institución, pero su reiteración en ciertos cuerpos de seguridad indica áreas críticas donde es urgente intervenir con medidas correctivas y de capacitación.
Las policías, en el centro de la controversia
El hecho de que la policía municipal encabece las denuncias refuerza una preocupación frecuente: el uso indebido de la fuerza, detenciones sin orden judicial y actos considerados arbitrarios o abusivos. Este patrón ha sido observado de forma reiterada en años anteriores, lo cual sugiere problemas estructurales en la actuación de algunos elementos policiales.
Los datos no sólo impactan a las víctimas directas, sino que proyectan una imagen institucional debilitada, especialmente en un momento donde se requiere fortalecer el vínculo entre la ciudadanía y las autoridades de seguridad pública.
Educación también bajo observación
Aunque con menor número de quejas, el sector educativo también figura en las estadísticas, lo cual visibiliza que la vulneración de derechos no se limita al ámbito policial o judicial, sino que puede darse también en contextos escolares, ya sea por trato inadecuado, discriminación o violación a los derechos de estudiantes.
Este dato destaca la necesidad de una formación integral en derechos humanos para docentes y personal administrativo, así como mecanismos eficaces para la atención de casos en el entorno educativo.
Aumento de quejas: síntoma de deterioro institucional
El aumento sostenido de denuncias ante la CDHEC debe leerse como un indicador de desgaste institucional y desconfianza ciudadana, especialmente cuando las quejas se concentran en cuerpos responsables de la seguridad y el acceso a la justicia.
La frecuencia con la que los términos “detención arbitraria” y “ejercicio indebido de funciones” aparecen en las estadísticas sugiere una distorsión en los procedimientos operativos que debe ser analizada y corregida con urgencia, antes de que se profundice la brecha entre ciudadanos e instituciones.
Implicaciones sociales y recomendaciones
La reiteración de quejas contra autoridades refuerza la percepción de que algunos servidores públicos no actúan bajo principios de legalidad, ética y proporcionalidad. Esto daña el tejido social y reduce la capacidad del Estado para garantizar el orden con legitimidad.
Frente a este panorama, se requiere:
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Mayor capacitación en derechos humanos para policías y funcionarios.
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Supervisión externa e independiente de los procedimientos de seguridad.
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Mecanismos accesibles de denuncia ciudadana.
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Transparencia en la resolución de quejas por parte de los organismos autónomos.
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