Rafael Devers: un nuevo episodio en la complicada relación de Red Sox con sus estrellas

Los Boston Red Sox enfrentan una posible crisis en 2025 debido a la situación con Rafael Devers.

El jugador más importante del equipo ha expresado públicamente en dos ocasiones su descontento con las decisiones tomadas por la organización, lo que podría convertirse en una distracción que afecte tanto los planes a corto como a largo plazo del club, además de fracturar de forma definitiva una relación que en algún momento se creyó sería duradera para toda la carrera del dominicano.

Sin embargo, el caso de Devers no es algo nuevo para los Red Sox. Desde que John Henry adquirió el equipo en 2022 y se convirtió en su vigesimosegundo dueño principal, han surgido diversas decisiones polémicas y enfrentamientos públicos entre la directiva, la gerencia y los jugadores.

Uno de los casos más notorios fue la ruptura con Manny Ramírez, quien fue cambiado a Los Angeles Dodgers tras una salida conflictiva. Ramírez no dudó en criticar duramente a los Red Sox al momento de su salida, acusándolos de maltratar a grandes figuras cuando estas se enfrentaban a la directiva o buscaban el apoyo de los aficionados.

En una entrevista con ESPN Deportes en 2008, Ramírez dijo: “Los Red Sox no merecen un jugador como yo. Vi cómo trataron mal a otros grandes como Nomar Garciaparra y Pedro Martínez. Intentan pintarme como el villano, pero amo a los fanáticos de Boston, aunque aquí no tengo paz mental”.

En el caso de Nomar Garciaparra, fue cambiado sorpresivamente en 2004 debido a disputas salariales públicas y problemas recurrentes de lesiones. Theo Epstein, entonces gerente del equipo, justificó su salida alegando que las lesiones habían deteriorado su defensa. Además, se rumoró que el club incluso habría dado instrucciones para que el terreno de juego en la zona de campocorto no estuviera en condiciones óptimas, lo que perjudicó la percepción defensiva de Garciaparra. Sin embargo, el jugador negó estar molesto con la organización.

Pedro Martínez también salió del equipo tras desacuerdos contractuales. Después de su último año en 2004, rechazó una oferta salarial que consideró irrespetuosa y dio un plazo para que Boston igualara la oferta de los Mets, lo cual no ocurrió.

Boston también enfrentó problemas públicos con otros jugadores por temas salariales y de rendimiento, como Jacoby Ellsbury, quien en su momento se perfilaba como un pilar para el futuro pero terminó dejando el equipo con destino a Nueva York sin alcanzar su mejor nivel.

Pablo Sandoval y Hanley Ramírez son ejemplos más recientes. Sandoval, reconocido por su actuación en postemporada con San Francisco Giants, llegó para cubrir la ausencia de un tercera base titular, mientras que Ramírez se esperaba que fuera un jugador regular en el cuadro interior o los jardines a pesar de sus lesiones anteriores. Sandoval tuvo problemas notorios de peso y fue criticado por el equipo por no lograr que mejorara, lo que terminó con su liberación en 2017. Ramírez, por su parte, perdió efectividad ofensiva a pesar de una buena temporada en 2016 y fue finalmente cortado tras una decisión del dirigente Alex Cora.

Uno de los episodios más delicados fue el traspaso de Mookie Betts a los Dodgers, después de meses de negociaciones públicas y sin llegar a un acuerdo para su extensión contractual. Betts expresó sentirse irrespetado por las ofertas recibidas, aunque con el tiempo suavizó su postura.

Situación parecida tuvo Xander Bogaerts, quien tras dejar Boston comentó que la oferta que le hicieron estaba muy por debajo de sus expectativas. “Vi a muchos grandes jugadores con los que jugué dejar la organización. Eso me hizo cambiar mi perspectiva”, comentó el campocorto ahora en San Diego.

Finalmente, Rafael Devers ha manifestado en dos ocasiones que “el equipo no cumple su palabra”. Considerando que en todos los casos anteriores los jugadores terminaron saliendo o siendo traspasados, el futuro de Devers en Boston es incierto. Si la historia sirve como indicio, su etapa en la franquicia podría estar acercándose a su fin.