La Velada del Año 5 se ha consolidado como uno de los eventos más relevantes en el universo gamer y del entretenimiento digital. Organizado por Ibai Llanos, el show reúne a reconocidos streamers en una mezcla de boxeo amateur y presentaciones musicales ante millones de espectadores, lo que lo convierte en un escaparate ideal para marcas y patrocinadores.
En este contexto, el premio de la Velada 2025 representa no solo reconocimiento al desempeño, sino también el reflejo del esfuerzo invertido en cada aspecto del evento, incluyendo el costo de sus galardones.
De acuerdo con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en México el 51 % de los gamers son hombres, y un 76 % prefiere jugar en dispositivos móviles, lo que evidencia el alcance masivo de este tipo de plataformas.
De fenómeno en Twitch a espectáculo global
Lo que comenzó como una propuesta curiosa en Twitch hoy es uno de los eventos más esperados del año. "La Velada del Año", creada por Ibai Llanos, ha sabido combinar entretenimiento, deporte y música en un formato innovador que ha batido récords de audiencia y ha llenado estadios con miles de asistentes.
En sus primeras ediciones, no existían premios monetarios por ganar las peleas. Los organizadores cubrían todos los gastos, y los participantes monetizaban a través de patrocinios personales y colaboraciones comerciales, que en algunos casos les generaron entre 25,000 y 35,000 euros por logotipos en su indumentaria o menciones en redes.
Para esta quinta edición, Ibai ha incorporado una novedad especial: premiará el mejor nocaut de la noche con una recompensa económica, financiada directamente por él. Aunque no ha revelado la cifra exacta, anunció durante una transmisión en vivo que se trata de un incentivo para mejorar el nivel del espectáculo.
La nueva era de los patrocinios en streaming
El crecimiento de las plataformas de streaming ha revolucionado tanto el entretenimiento como la manera en que las marcas se vinculan con el público. Ahora, los patrocinios se integran de forma creativa y orgánica al contenido, alejándose de los formatos publicitarios tradicionales.
En lugar de interrumpir al espectador, los anunciantes se hacen presentes mediante menciones, colocación de productos o colaboraciones especiales, lo que permite una conexión más natural y efectiva con las audiencias.
Algunas marcas financian programas exclusivos o se integran a segmentos temáticos que reflejan sus valores. Esta estrategia les permite alcanzar públicos específicos en momentos de máxima atención sin necesidad de forzar su presencia.
Un caso emblemático es el de Coca-Cola, que ha patrocinado producciones originales en plataformas como Netflix y YouTube, aprovechando su reconocimiento global y el factor nostalgia para conectar con nuevas generaciones.