¿Se acabó la dinastía de Stephen Curry y los Warriors en la NBA?

Los Golden State Warriors quedaron eliminados de los playoffs de la NBA tras una serie complicada de cinco partidos contra los Minnesota Timberwolves, en la que su estrella Stephen Curry sufrió una lesión justo después del primer juego —que curiosamente fue el único que ganaron.

Aunque el equipo hizo un intercambio para incorporar a Jimmy Butler III desde Miami Heat hace unos meses, eso no fue suficiente para darle un giro a un equipo que ya intentaba avanzar sin uno de los miembros fundadores de su dinastía, Klay Thompson, quien tras haber sido clave en los cuatro campeonatos ganados entre 2015 y 2022, se fue a los Dallas Mavericks el año pasado.

Con esta nueva eliminación y la imposibilidad de extender su reinado, que ha incluido cuatro títulos en los últimos ocho años, surgen dudas sobre si los Warriors podrán competir por un quinto campeonato en poco más de una década. Equipos jóvenes y talentosos de la Conferencia Oeste como Oklahoma City Thunder, Denver Nuggets y los mismos Timberwolves han avanzado y parecen haber dejado atrás a Golden State.

La gran pregunta es: ¿fue esta la última vez que vimos al trío Curry, Kerr y Green pelear con todo, incluso con Butler? ¿O aún queda un último gran esfuerzo de uno de los equipos más importantes en la historia reciente de la NBA?

Stephen Curry, que tiene 37 años y contrato vigente hasta 2027, enfrenta el desafío que representa su edad y las lesiones. En las últimas ocho temporadas, solo una vez ha disputado más de 70 partidos. Esta temporada, el manejo cuidadoso de sus dolencias en la rodilla y pelvis no evitó que una lesión muscular en la segunda ronda lo dejara fuera, evidenciando lo complicado que será mantenerlo sano conforme avanza en su carrera.

Aunque Curry ha declarado que no está cerca de retirarse, la oportunidad de pelear por un nuevo título se vio fortalecida con la llegada de Butler. Sin embargo, Butler también ha enfrentado lesiones durante la postemporada, y con 35 años, junto con Draymond Green —también de 35—, el equipo veterano ha mostrado signos de fatiga ante rivales más jóvenes y físicos como Rudy Gobert o Naz Reid.

El apoyo desde la banca, que en el pasado fue vital gracias a jugadores como Andre Iguodala o Jordan Poole, este año no fue suficiente. Jonathan Kuminga y Buddy Hield ayudaron a mantener al equipo competitivo en ausencia de Curry, pero la diferencia fue notoria.

Los Warriors dependen cada vez más de un Curry que, acercándose a los 40 años, muestra un estado físico más vulnerable, y de un grupo veterano que tendrá dificultades para enfrentar la juventud y energía de otros equipos emergentes.

En cuanto a Jimmy Butler, su promedio de 17.5 puntos por partido es el más bajo desde su temporada 2013-14. Su estilo de juego, basado en atacar la canasta y jugar más cerca del aro que en tiros de tres puntos, contrasta con el perfil ofensivo que ha tenido Curry durante su carrera. La mejor pareja de Curry siempre fue Klay Thompson, cuyo juego de triples ayudaba a abrir la cancha y crear espacios, algo que Butler no puede replicar, dificultando la ofensiva cuando Curry no está en la duela.

Es poco probable que Butler se convierta en un tirador más efectivo desde fuera, por lo que Golden State tendrá que replantear su ofensiva o buscar otro jugador que complemente a Curry desde el perímetro.

Mientras tanto, nuevas generaciones de equipos jóvenes están irrumpiendo con fuerza. Los Rockets, con jugadores como Amen Thompson y Alperen Sengun, llevaron a Golden State al límite; Oklahoma City Thunder es el equipo más joven de la liga con promedio de 24 años y pelea por llegar a las finales de conferencia; y los Timberwolves, que eliminaron a los Warriors, cuentan con jóvenes como Anthony Edwards de 23 años.

En el Este, los Pacers y Knicks, con promedio de edad similar, tienen buenas chances de llegar lejos, evidenciando un cambio generacional que aleja a los equipos más veteranos.

Sorprende que Golden State haya sido considerado candidato al título antes de la lesión de Curry. La llegada de Butler abrió una ventana a corto plazo que ahora deberá revisarse tras la eliminación en segunda ronda.

Por otro lado, la NBA ha mostrado que un solo movimiento puede cambiar el panorama rápidamente, como la llegada de Luka Doncic a los Lakers, que los volvió contendientes a mediano plazo pese a su eliminación temprana.

Además, se comenta que Giannis Antetokounmpo podría evaluar su futuro este verano. ¿Podrán los Warriors conseguir a una superestrella así para extender su competitividad?

Después de cuatro años de aparente declive tras el título de 2018, Golden State sorprendió ganando de nuevo en 2022. Ahora queda la duda de si aún les queda alguna carta mágica para seguir siendo protagonistas.

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