Sin bajas en ventas de carne asada durante Semana Santa
Pese a la tradición de no consumir carne en Semana Santa, los asaderos de Piedras Negras reportan ventas estables.

José Juan Rodríguez, trabajador de un restaurante en Piedras Negras, Coahuila, confirmó que durante los días santos de Semana Santa, las ventas de carne asada se mantienen estables, a pesar de las tradiciones religiosas que sugieren evitar su consumo.
En Piedras Negras, los restaurantes especializados en carne asada continúan operando con normalidad durante la Semana Santa, sin registrar disminución en la demanda, a pesar de las costumbres religiosas que promueven evitar el consumo de carne roja durante el Jueves y Viernes Santo.
De acuerdo con José Juan Rodríguez, trabajador de uno de los negocios dedicados a la venta de este tipo de platillos, los pedidos se mantienen constantes y en niveles normales, incluso en los días tradicionalmente más sensibles para los fieles católicos.
“La gente sigue viniendo. Tenemos pedidos como cualquier otro fin de semana. Vamos a seguir abriendo de manera habitual, con todos los cortes disponibles, desde arrachera hasta costillas, fajitas y más”, indicó el empleado.
Aunque durante años la tradición católica ha sugerido la abstinencia de carne roja como forma de penitencia en los días más significativos de la Semana Santa, Rodríguez considera que esta práctica ha perdido fuerza con el tiempo, especialmente en una región como el norte de México, donde el consumo de carne asada forma parte de la identidad cultural y gastronómica.
“Cada vez menos personas siguen esa tradición. Aquí en el norte, la carne asada no es solo comida, es parte del estilo de vida, de la reunión familiar, de la convivencia”, afirmó.
La carne asada, tradición del norte más allá de la religión
En Piedras Negras y gran parte del norte del país, el asado de carne se ha convertido en un símbolo de reunión social y en un elemento cotidiano en las mesas de muchas familias. Es común ver a grupos de amigos o familias reunidos los fines de semana en torno a un asador, sin importar la fecha del calendario litúrgico.
Algunos restauranteros aseguran que incluso durante Semana Santa se incrementan las ventas, especialmente cuando el clima es favorable para reuniones al aire libre. “Muchos aprovechan los días libres para convivir, y parte de esa convivencia es la carne asada. No todos siguen las restricciones religiosas y eso se refleja en el flujo de clientes”, agregó Rodríguez.
Aunque algunos establecimientos en el país optan por adaptar sus menús durante la Semana Santa, incluyendo opciones como pescados y mariscos, los asaderos tradicionales de Piedras Negras mantienen su oferta regular, confiando en la fidelidad de sus clientes.
Diversidad gastronómica para todos los gustos
Pese a que la abstinencia de carne roja aún es observada por sectores más devotos, la tendencia general apunta a una mayor flexibilidad en las prácticas religiosas, especialmente entre los jóvenes y familias modernas que priorizan la tradición regional sobre la litúrgica.
En ese sentido, muchos restaurantes también apuestan por la diversificación del menú, ofreciendo alternativas como tacos vegetarianos, ensaladas o platillos con mariscos, sin dejar de lado su propuesta principal: los cortes al carbón.
“Nos adaptamos si el cliente lo pide, pero la mayoría viene por la carne, y eso no cambia ni en Semana Santa”, añadió Rodríguez.
¿Qué dice la Iglesia sobre el consumo de carne en Semana Santa?
La Iglesia Católica recomienda la abstinencia de carne roja los viernes de Cuaresma y particularmente el Viernes Santo, como una forma simbólica de recordar el sacrificio de Jesús. Sin embargo, no se trata de una norma obligatoria bajo pena, sino de una sugerencia espiritual que cada fiel decide cómo vivir.
En muchos casos, esta práctica ha sido sustituida por otros gestos de penitencia o reflexión, como asistir a celebraciones religiosas, hacer obras de caridad o dedicar tiempo a la oración.
Convivencia, tradición y fe pueden coexistir
Para muchos habitantes del norte de México, la fe y la tradición gastronómica no están necesariamente en conflicto. Mientras algunos eligen participar en actos religiosos o abstenerse de carne, otros ven los días santos como una oportunidad para compartir en familia, sin modificar radicalmente sus hábitos alimenticios.
“La Semana Santa tiene que ver también con la unión familiar, y para nosotros esa unión muchas veces sucede alrededor del asador. Es una tradición que no se pierde”, concluyó José Juan Rodríguez.
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